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Se confirma: «William Shakespeare era católico»

agosto 27, 2012

William Shakespeare fue en realidad católico.

«en tiempos de la Conjura de Somerville de 1583, cuando también los familiares maternos, incluida la madre de Shakespeare, Mary Arden, a causa de su fe fueron sometidos a la acusación de alta traición por Sir Thomas Lucy di Charlecote Park».

(Transcrito de La Bussola Quotidiana /Antonio Giuliano / Traducido por José Martín Alonso)

Católico o no católico, éste es el problema, se podría decir parafraseando el dicho de Hamlet. En realidad, la tesis que desde hace ya años el gran William Shakespeare fue fiel de la Iglesia de Roma, hoy es mucho más que una hipótesis. 

La confirmación nos llega de un sorprendente número de libros publicados recientemente. Y es que, si ya finalmente un autor popular laico inglés como Peter Ackroyd lo admite en su Shakespeare: Una biografía (Neri Pozza), convincente y bien ponderado es el último volumen de la inglesa Elisabetta Sala El enigma de Shakespeare: ¿Cortesano o disidente? (Ares). 

La autora que escribió Isabel la Sanguinaria (Ares), había desenmascarado brillantemente la propaganda que rodea la época isabelina, y saca a la luz la disidencia del dramaturgo y sus relaciones con los católicos perseguidos por la reina.

Quien no ha tenido jamás dudas hamletianas sobre el catolicismo de Shakespeare y desde hace años pelea contra una cierta crítica todavía suspicaz es Peter Milward, jesuita inglés, profesor de Literatura Inglesa en la Universidad Sofía de Tokio, máximo experto de la religiosidad del Bardo. 

“Es una hipótesis que sostengo ya desde 1973, cuando publiqué mi primer libro Shakespeare´s Religious Background (El fondo religioso de Shakespeare). Hoy afortunadamente son muchos lo libros que relanzan esta cuestión, pero hay todavía un cierto prejuicio académico que es difícil erradicar”.

– Profesor Milward, ¿Por qué está tan convencido de que Shakespeare fue católico?

– Sabemos que su padre, John Shakespeare, recopiló de su puño y letra un testamento espiritual que se encontró escondido entre las vigas del techo de su casa de la calle Henley en Strafford. Aquel documento (del cual hoy tenemos una copia de 1700 reconocida como auténtica) fue probablemente escondido allí en tiempos de la Conjura de Somerville de 1583, cuando también los familiares maternos, incluida la madre de Shakespeare, Mary Arden, a causa de su fe fueron sometidos a la acusación de alta traición por Sir Thomas Lucy di Charlecote Park. Y los nombres tanto del padre John (en 1592) como de su hija Susana Hall (en 1606) figuran en la relación de católicos que se negaban, de aquellos que rechazaban acudir a las funciones obligatorias religiosas del Estado

Eran años de caza a los disidentes católicos como consecuencia de un bando severo lanzado en nombre de la reina en 1591, y otro al día siguiente de la Conjura de la Pólvora de 1605.

– ¿Cómo es que la Reina Isabel I (1533-1603) tan feroz con los católicos lo aceptó en la corte? 

– Obviamente en una tal situación de persecución, Shakespeare fue obligado a silenciar su fe católica. Tuvo que vivir de forma enmascarada, como su Edgar en Rey Lear , y así ha permanecido hasta hoy. Su máscara era la de un personaje menor de edad, de uno que él mismo llamaría el “bufón”. Dudo que la reina Isabel haya intuido su camuflaje (aunque hay autores convencidos de ello). 

Sabemos, sin embargo, por ejemplo que la reina se dio cuenta de la Fe católica del gran compositor William Bird y le consintió permanecer en la corte porque tenía necesidad de él para la música de la capilla real. Del mismo modo podría haber actuado con Shakespeare porque valoraba su trabajo, sobre todo las comedias y especialmente el personaje de Sir Jhon Falstaff.

¿Fue obligado, por tanto, a recurrir a los símbolos para no incurrir en la censura?

– Sí. Son ciertamente los símbolos, las imágenes o los temas a lo que recurre en sus trabajos para mostrar su catolicismo. Tomemos como ejemplo un tema como la peregrinación. Está presente en muchas de sus obras: Ricardo II, El Mercader de Venecia, Como os plazca y Rey Lear. La costumbre de recurrir a la peregrinación era típicamente medieval y católica, pero fue prohibida por los protestantes en tiempos de Enrique VIII, quien cerró todos los santuarios en Inglaterra. 

Otra imagen típica de los católicos perseguidos en Inglaterra ha sido por ejemplo la condición del destierro y de la marginación que no por casualidad reaparecen en sus obras. Como cuando Ricardo II, en el momento de ser destronado, aconseja a su dolorida reina retirarse a Francia y entrar en un convento como forma de alcanzar “la corona de un nuevo mundo”, mientras él deberá soportar el arresto. 

Otro tema es la forma en la que el dramaturgo trata a los frailes en obras como Romeo y Giulietta, Mucho ruido y pocas nueces y Medida por medida. Mientras los dramaturgos protestantes como Robert Greene y Chistopher Marlowe los tratan con escarnio como personajes ridículos, Shakespeare los respeta y lo hace de modo que también sus personajes los respeten.

– ¿Cuáles son las demás obras que manifiestan su fe? 

– En uno de mis libros Influencias bíblicas en las grandes tragedias de Shakespeare (editada por la Universidad de Indiana) he analizado, acto por acto, línea por línea, las cuatro grandes tragedias Hamlet, Otelo, Macbeth y Rey Lear, encontrando ciertamente numerosas referencias de la Biblia. Sobre todo las últimas tres escritas ya al comienzo del reinado de Jacobo I (para Hamlet reinaba todavía Isabel I) las considero todas en conjunto como las “obras de la pasión de Shakespeare” porque hacen volver al evangelio de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Pero en mi último libro Shakespeare the Papist demuestro cómo todas las obras admiten una interpretación católica y bíblica, Si no se admite este sustrato, este fondo católico, muchas obras permanecerían enigmáticas.

– Ha causado asombro también la declaración del primado de la Iglesia Anglicana, Roman Williams, quien ha admitido el catolicismo del Bardo.

– Estoy muy contento. El mismo arzobispo de Canterbury me ha confiado que ha madurado esta convicción también por la lectura de algunos de mis escritos. Pero no es suficiente reconocer que Shakespeare fue católico. Es necesario tomar nota de que nos encontramos frente a un testigo importante de aquel catolicismo inglés que fue cruelmente perseguido por Enrique VIII y por Isabel I y por sus crueles ministros, Thomas Cromwel y William Cecil.
– A pesar de todo persisten todavía muchas desconfianzas en relación a esta hipótesis…

Hay sobre todo un secular prejuicio académico de parte de un grupo de estudiosos de Shakespeare. Ellos gozan de tribunas universitarias importantes y de publicidad mediática. El problema es que algunosautores como Peter Ackroyd admiten el fondo católico de Shakespeare. Pero no se puede comprender su papel de testigo de la cristiandad y su catolicismo si no se estudian a fondo sus obras y no se tienen en cuenta las duras persecuciones de ese tiempo. 

Shakespeare ha vivido ciertamente en una época en la cual los católicos ingleses vivían en el miedo como los cristianos coptos hoy en Egipto. Incluso los sacerdotes, incluso los jesuitas, temían ser descubiertos, arrestados, hechos prisioneros, torturados y ajusticiados como traidores. Él no fue al encuentro del martirio, pero tenía una gran fe católica. Y se sintió comprometido como dramaturgo, en la misión de proclamar la verdad de su época y la fe de lo que Hamlet llama “el mundo aún no conocido”.

30 comentarios leave one →
  1. adold degrelle permalink
    agosto 28, 2012 12:01 am

    Shakespeare siempre fue leal a la verdadera fe; prueba de ello fue como afronto el problema de la usura hebrea en su magna obra el Mercader de Venecia donde se me quedó esta bella frase grabada en mi mente: «Están tan enfermos quienes indigestan de hartura como los que el vacío hace morir de hambre».

    En mi opinión personal, junto con Shakespeare, las mejores plumas de que ha tenido la Iglesia son: Miguel de Cervantes, Lope de Vega, Francisco de Quevedo, R.P Leonardo Castellani, R.P Julio Meinvielle y Hugo Wast……..

    • agosto 28, 2012 5:54 am

      Degrelle.

      San Pío V, instituyó en 1571 la Sagrada Congregación del Índice.

      El Índice fue actualizado regularmente hasta su suspensión, en 1966.

      Aunque la mayoría sean buenos católicos, algunos que mencionas distan mucho de ser los «mejores autores» católicos. Especialmente Castellani quien fue expulsado de la orden jesuita y suspendido como sacerdote, hasta que fue rehabilitado por Pablo VI en 1966, luego de suspender el ïndex. Pío XII se negó a perdonar a Castellani por su obstinación.

      Las razones fueron variadas, entre estas la necia difusión de las tesis milenaristas del cripto hebreo confeso Manuel Lacunza (Juan Josafat Ben-Ezra) cuya mesiánica obra principal fue inscrita en el Index librorum prohibitorum et expurgatorum y por la cual su impresión y difusión acarrea la excomunióm para los responsables.

      Otro que fue censurado parcialmente por la Sagrada Congregación del Índex fue Miguel de Cervantes Saavedra quien debió suprimir del Quijote, entre otras, la frase «…las obras de caridad que se hacen tibia y flojamente no tienen mérito ni valen nada» (2.ª parte, capítulo 36).

      En la materia se debe tener cuidado a la hora de endosar el crédito a todas las obras contemporáneas en materia de Fe y Moral. Sobre todo porque hoy en día no hay una autoridad pontificia que revise siquiera las dichas obras.

      Unidad en la Fe

    • febrero 22, 2014 8:58 am

      Por más que Shakespeare fuera católico siempre estuvo encontra de las discriminaciones y los racismos. El mercader de Venecía de ningún modo se puede interpretar como antisemita por más que muchos antisemitas hayan citado tal obra.

      FC. nadie está diciendo que se deba ser «antisemita», simplemente Shakespeare reflejó la realidad acerca de la perfidia, la insidia y el odio anticristiano de los hebreos. Esa es la verdad y también el hecho de que también los árabes y los orientales son pueblos semitas.

      Si lees sin odios vas a encontrar en esta obra cómo se solía tratar a los judios, Shak deliniea el reflejo de lo que pasaba en españa con lo que pasaba en Inglaterra con los católicos.

      FC: en realidad el evento es en Italia. Pero tienes razón, así eran y son los hebreos cabalistas en todo el orbe.

      No olvides que en ese momento España expulsaba a los judios y a los moros e Inglaterra perseguía y asesinaba católicos. Justamente para hablar en contra del racismo por color de piel Shak escribe otra obra llamada Othelo, el moro de Venecia, donde Yago o Iago lo odia sin una razón creíble y el lector adivina que lo odia por ser negro. Otra más es La Tempestad, donde, a través de la figura de Calibán y Ariel delinea el habitante de las américas, y denuncia veladamente (como siempre lo hace, para que lo capten los buenos lectores) el racismo contra los habitantes originarios de América, que los españoles, aún en error, llaman indios.

      FC: los católicos nunca nos hemos referido al color de piel para diferenciar a las personas en materia moral.

      Con lo dicho te pido que seas católico de verdad, no antisemita, Dios nos dice que amemos al otro y ese otro es TODOS los otros.

      FC: díselos a los racistas, no a nosotros.

  2. adolf degrelle permalink
    agosto 28, 2012 8:29 am

    @Foro Católico: gracias por el dato, de verdad no sabia la información sobre Castelllani y Cervantes……..lo tendre en cuenta de ahora en adelante.

  3. RuyDiaz permalink
    agosto 28, 2012 8:49 am

    No escribo en este foro, pero creo deber enviar esta nota, en caso que yo este equivocado, o que el articulo en cuestion se preste para malas interpretacones ( no es claro si F.C. esta de acuerdo o no con la premisa de que Shakespeare ahora resulta que no solo era «Catolico», sino que ademas era un «buen Catolico» ).

    En lo personal, tenia la impresion que Shakespeare no era Catolico. Es mas, tenia entendido que tenia raices hebreas. El que ultimamente los medios le hayan hecho propaganda de ser «homosexual latente», y ahora lo vengan a «calificar» de «Catolico», me da para pensar que todo es una trama urdida para seguir en la persecucion a la Iglesia Catolica.

    Otro que tampoco era Catolico y ademas parece era satanista, era Edgar A Poe. No sea que en pocos meses salga la notica que ese tambien era un «buen Catolico».

    • agosto 29, 2012 7:22 am

      Qué hay Ruy.

      Si pones un poco de atención verás que:

      1. La nota fue transcrita íntegra de «La Bussola Quotidiana /Antonio Giuliano», no es originada por Foro Católico.

      2. No hay ninguna prueba, que sepamos nosotros, de ninguna raíz hebrea en Shakespeare, todo lo contrario, tiene raíces católicas como casi todos en la Inglaterra en el siglo XVI. Decimos «casi» por la excepción de los Cromwell y los Bolena, entre otros quienes se ocultaron con el bautismo forzado luego del edicto de expulsión del Rey Eduardo I en 1290.

      3. El «antisemitismo» de Shakespeare (calificado así por la Sinagoga) quedó patente en la obra El Mercader de Venecia.

      4. La campaña en contra de Shakespeare demuestra el odio, no el amor de Hollywood.

      5. Poe no es mencionado en el artículo, pero sería mejor aportar los elementos que mencionas.

      Unidad en la Verdad

      • RuyDiaz permalink
        septiembre 9, 2012 1:41 pm

        El raciocinio que ud usa para defender a Shakespeare; el cual no nos consta sea Catolico, asi ahora siglos despues y por arte de «magia» lo «descubran» como tal, puede usarse tambien para defender a S.E. Msgr Lefebvre. El odio acerrimo que le profesan, y la persecucion de la cual fue y es aun hoy dia objeto por parte de los medios, la izquierda, los ateos, la sinagoga de satanas, la masoneria, y demas viboras y maleza; nos dan una pauta para medir el odio que le tiene el demonio por haber rescatado la tradicion y mantener la verdadera Iglesia

        • septiembre 9, 2012 4:37 pm

          Ruy.

          Los católicos no odiamos a los herejes, sino las herejías, sean de quien sean.

          Si tienes pruebas o elementos de que Shakespeare era un hereje, infórmalo, así como hemos publicado las pruebas de que Lefebvre fue un hereje, un cismático y un traidor a los «católicos perplejos», como él mismo los llamó.

          Asimismo hemos demostrado que Lefebvre, ni rescató la Santa Misa, la cual dejó de lado por la alterada de Juan XXIII; ni tampoco defendió la Fe como era su obligación; ni menos fue devoto del Papado, tal y como los santos y buenos cristianos lo han sido; sino que promovió la desobediencia y el juicio ilegítimo contra la Primera Sede.

          Asimismo, contemporizó durante años con los jefes de la que en ocasiones él mismo llamó la Logia Vaticana.

          Y no lo decimos nosotros, lo dicen sus propios seguidores.

          Unidad en la Verdad

      • RuyDiaz permalink
        septiembre 10, 2012 6:27 pm

        Lea bien mi nota, no he afirmado ni negado que Shakespeare fuera hereje, simplemente nunca se supo que fuera Catolico, y apenas hoy dia -siglos despues-, nos vienen con el cuento del «descubrimiento» de que era Catolico ( hoy dia aparecen ‘catolicos», «santos», «evangelios», «cuadros y obras de arte», etc, de los cuales nunca se supo…).

        En cuanto a S.E. Msgr Lefebvre, ni fue cismatico, ni fue traidor, ni «contemporizo» con los jefes de la vaticueva. Eso no solamente es una falta de caridad, sino que ademas es una afirmacion calumniosa. Que si fue ordenado por un mason o no, no significa que el fuera mason, y de hecho por su obra se advierte que era todo lo contrario. Mas aun, tiempo despues y al ver la obra de S.E. Msgr Lefebvre, el obispo que se dice era mason y que lo ordeno, confeso arrepentirse de haberlo ordenado. Por otro lado, S.E. Msgr Lefebvre pudo en un principio haber firmado los documentos que uds mencionan, pero al ver el error se retracto y de ahi en adelante se separo totalmente del vaticano y fue el mas acerrimo defensor de la tadicion. Tristemente en un acto de falta de caridad, eso no se lo acreditan y solo se quedan en el error inicial en el que pudo haber incurrido. De hecho si hoy dia queda tradicion dentro de la Iglesia Catolica, en una gran medida, es gracias a el. Uds se han quedado en lo que firmo durante el CVII ( y de lo cual se arrepintio y contra lo cual lucho el resto de sus dias ), pero omiten lo que es de publico conocimiento, y es la defensa acerrima que hizo de la tradicon y la Santa Iglesia Catolica hasta el dia de su muerte. De hecho fue tan grande su defensa de la tradicion, que sufrio -no solo en vida, sino aun hoy dia despues de muerto-, la persecucion implacable del demonio y sus secuaces en la tierra. Esto nos da la pauta de lo heroica que fue su lucha en favor de la tradicon y de la Iglesia Catolica, y en conta de satanas. Los masones no descansan en sus diatribas en contra de los soldados de NSJ, no solo mientras ellos viven, sino siguen atacandolos y vilipendiandoles aun despues de muertos.

        • septiembre 11, 2012 2:45 pm

          Ruy Díaz.

          Nosotros no dijimos que tú negaras que Shakespeare fue católico.

          Pero sí pones en duda gratuitamente que lo era.

          Según tú: «nunca se supo que fuera Católico, y apenas hoy día -siglos después-, nos vienen con el cuento del “descubrimiento” de que era Católico».

          Contrariamente a tu duda insistente, por tu propia «autoridad», sí tenemos varios elementos antiguos -no de «hoy en día»- como el hecho de que sus padres eran católicos y fueron perseguidos por ello. Si se ocultaron por ser católicos, es muy probable que sus hijos hayan sido bautizados en su misma religión ¿no te parece lógico?… y los demás que mencionan los verdaderos investigadores…

          En cuanto a Marcel Lefebvre sí fue cismático, de la Nueva Iglesia y de la verdadera Iglesia. De la Nueva Iglesia al supuestamente ordenar sacerdotes y obispos sin permiso de quienes él llamó y reconoció como Papas hasta su muerte. Por definición se separó de la autoridad romana e incurrió en cisma y herejía, condenados en el CIC 1983 (que él consideró legítimo) a excomunión latae sententia y otras sanciones.

          De la verdadera Iglesia fue cismático, hereje y apóstata al contemporizar con los usurpadores, al aprobar las actas del Vaticano II, suplantar el misal de San Pío V por el alterado de Roncalli, al celebrar «misas» en los templos profanados por la él mismo denominada «misa bastarda», la cual él mismo celebraba en ceremonias familiares como las exequias de su hermana mayor.

          Todo lo anterior independientemente de haber hecho sucumbir la resistencia durante el Vaticano II con la traición en la dirigencia cómplice de la Coetus Internationalis Patrum, cuyos miembros finalmente dieron su apoyo a las actas y decretos del Conciliábulo, arrastrados por Lefebvre, Castro Mayer, Spellman y otros traidores. Igualmente la traición a la Orden de los Espiritanos por él presidida y que fue entregada en su totalidad a la Bestia. también se traicionó a sí mismo, a a sus posturas, al firmar los Protocolos de 1988 con la por él mismo bautizada «Logia Vaticana» de la por él reconocida «Roma Apóstata».

          La afirmación categórica de que Liénart era masón desde joven, las confirmó el propio Lefebvre en su famosa homilía en Canadá. Las consecuencias sacramentales y canónicas son muy graves, independientemente de las herejías de Lefebvre. Si Lefebvre mintió o se equivocó al afirmar ese hecho es irrelevante. Liénart era hereje modernista público y notorio desde que era muy joven, se le llamaba el cura rojo de Lille, por su apoyo a los excomulgados comunistas.

          Todo el mundo sabe -hasta Joelito- que Liénart fue el operador de la Bestia en el Conciliábulo, y que fue él quien promovió e introdujo a Lefebevre en la Comisión Central preparatoria del Concilio Vaticano II, al lado de puras finísimas personas como Suenens, Alfrink y el propio Liénart. Ya se sabe también que todos los cardenales franceses, incluido Joseph Charles Lefebvre, primo de Marcel, pertenecían a la masonería y operaban para la Bestia.

          La defensa de la Sagrada Tradición por parte de Lefebvre es un verdadera falacia.

          A los únicos papas que ataca Lefebvre en su escritos es a Pío IX, Pío XI y Pío XII. Precisamente porque condenaron a los herejes «tradicionalistas», descendientes del hebreo de Praga, Schwarzenberg; herejes como Louis Billot, Le Floch, el illuminati Fracois Ducaud-Bourguet y los todos seguidores del hebreo Lacunza.

          Lefebvre denostó y calumnió a Pío IX, de quien relativiza el dogma de la infalibilidad, y reniega del dogma del Primado de Jurisdicción.

          Lefebvre acusó a Pío XI de haber entregado a los cristeros mexicanos en las garras de la Sinagoga y de ser injusto y cruel en contra de sus maestros herejes Billot, Le Floch, Maurras y Guenon.

          Lefebvre fomentó la doctrina milenista del hebreo Josafat Ben Erza, alias Manuel Lacunza, o viceversa.

          Lefebvre firmó en 1988 el acuerdo con el multihereje Wojtyla Katz, quien encabezó el aquelarre de Asís en 1986.

          Por uno solo de esos crímenes, jamás podríamos llamar a Lefebvre auténtico defensor de la Fe, ni siquiera de la Tradición.

          Los verdaderos jerarcas masones ayudaron y promovieron a Lefebvre. Los jefes ocultos como Achille Liénart (°33), el cardenal Joseph Charles Lefebvre, el Cardenal Francis Spellman, Antonio Castro Mayer, Francois Ducaud Bourguet, René Guenon, Rama Coomaraswamy, Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I, Juan Pablo II y Benedicto XVI, Michael David, y muchos más; no sólo no atacaron a Marcel Lefebvre sino que lo formaron, lo apoyaron, lo impulsaron y lo reconocieron.

          Ahí está la historia verdadera, la cual no miente.

          Unidad en la Verdad

      • Cirilox permalink
        febrero 23, 2014 1:54 pm

        Buen comentario el tuyo amigo Ruy Diaz, pero tu error es tratar e dialogar con el pérfido forosatanico propiedad de editado que es el dueño del balón de este blog y por ende estas en desventaja.
        Es mas que obvio que la Iglesia apostata postconciliar,a la única oposición organizada que tiene y además reconoce es la fsspx, (…) pero este loco insiste en descubrir el hilo negro y regar toda clase de excremento en contra de M. Marcel Lefebvre, rogemos por él para ue Dio lo perdone.

        • febrero 23, 2014 2:51 pm

          Ciriloco.

          El problema es que no se debe dialogar -a lo comunista- sino defender y aceptar la Verdad. En eso el pobre de Ruy tiene muchos problemas.

          Y dices algo muy cierto; a la única «oposición» que reconoce la Logia Vaticana es a la famélica FSSPX, porque no le conviene reconocer a nadie más, es claro para quien lo quiere ver y oír.

          Sobre tus insultos, no hacen más que demostrar la impotencia ante la realidad.

          Unidad en la Verdad

    • febrero 22, 2014 9:13 am

      ¿Para tí homosexual y satanista es algo igualmente negativo como para que sea mala prensa? He leído todos los comentarios y encuentro que mis hermanos católicos, los que han hecho comentarios en este foro, estan enfermos de odio. Escuchen a nuestro Papa Francisco, que está tratando de encausarnos nuevamente en la senda del amor y apartarnos de la del odio. Caer en el odio es facil, amar es una virtud que debe trabajarse día a día, tratando de ponernos en la piel del otro. Los judios no son un pueblo de usureros como se ha dicho aquí, ni tampoco por mal interpretar a Shakespeare. Amar es algo milagroso y no importa si una persona ama a un hombre o a una mujer, y decide pasar su vida con esa persona.
      Les pido que habran sus corazones y sus cabezas al amor, no al odio.

      • febrero 22, 2014 9:51 pm

        Rubén.

        La verdad es que nadie pone en duda que los hebreos son un pueblo de usureros, ni ellos mismos. ¿No conoces chistes de hebreos?. Y eso es lo menos que podemos decir de ellos…

        Lo del odio a los hebreos, no hay tal en los católicos. Y otra verdad es que ellos sí tienen cultivan y profesan un odio bimilenario contra los cristianos. Ahí está el comunismo de prueba.

        Unidad en la Verdad

      • febrero 23, 2014 8:21 am

        «La verdad es que nadie pone en duda que los hebreos son un pueblo de usureros, ni ellos mismos». Acá se usa la palabra verdad como si Dios mismo hablara a través de los mensajes de los foristas. Esa atribución que se toma ForoCatolico es un pecado y una clara falta de autojuicio. Es increíble que lea la justificación del odio por el supuesto odio del otro. Y es un verdadero chiste que te justifiques en los «CHISTES» para argumentar tu odio racial. Los «chistes» de los que hablas reflejan el racismo, al igual que los «chistes» de negros, de gallegos, los xenófobos, los misóginos, los de gays, y un largo etcetera.
        No se quien dirige este foro, pero realmente si permiten que sus moderadores sean racistas caen en su propia deslegitimación como personas de bien y como católicos. Me despido, no volveré a visitar un foro lleno de nazis ya que me hace mal al alma. Le pido a Dios que despeje el odio de sus corazones y los llene de amor.
        Y si quieren borrar este mensaje es porque no respetan la palabra de los demás.

        • febrero 23, 2014 2:43 pm

          Rubén.

          Contrariamete, saludamos y nos favorece que escribas en el Foro, sobre todo porque nos permites aclarar los errores que muchos teníamos o tienen a la hora de comprar las etiquetas diseñadas por el Nuevo Orden Mundial; como esa de que cualquiera que diga la verdad de la Sinagoga de Satanás es un «nazi».

          Acerca de la usura de los hebreos, existen sendas condenas papales que así los acusan, o para ti ¿acaso el Papa Pablo IV era un nazi?…

          Y no es el odio, sino el amor a la Verdad el que nos obliga a señalar a los enemigos de la Fe Cristiana.

          Unidad en la Verdad

  4. agosto 28, 2012 9:16 am

    MUNDO CRISTIANO

    FC: Excelente noticia, aunque no sabía lo del Padre Castellani. Yo también lo tendré en cuenta de ahora en adelante. 😯 😥 😥 😥

    Por otra parte, me gustaría saber vuestra opinión sobre el libro «¿FIN DE LA IGLESIA CATÓLICA EN EL SIGLO XXI?» de Basilio Kostas:

    http://www.libreriaeuropa.es/ficha.php?codart=GLE

    LA SALETTE

  5. adolf degrelle permalink
    agosto 28, 2012 7:04 pm

    Una consulta a Logan, Foro Católico, Mario, Inés, Alicia o Wulfrano o cualquier otro forista: ¿Que opinaís de la teología de Joaquin De Fiore? suena muy protestante y parecida a la teología empleada por Lacunza……espero su respuesta y de antemano gracias.

  6. Inés permalink
    agosto 29, 2012 7:06 am

    Cervantes cometió, sin duda ninguna, el error que el Index señaló, puesto que figura en él. Pero una golondrina no hace verano, como dice el refrán. De hecho lo corrigió tal y como se le pedía.

    Pero tan cierto como eso es que nunca fue molestado ni procesado por el vigilantísimo Tribunal de la Inquisición, que hilaba muy, pero que muy fino en esas materias de doctrina antes de que cualquier obra se publicase.

    En la edición que tengo, con preciosísimos y numerosísimos grabados de distintas épocas, pero todos antiguos y en blanco y negro se dice al final de su biografía que : «Su cadáver fue amortajado con el sayal de la Orden Tercera de S. Francisco, en la que había ingresado en 1613, y llevado a la iglesia de las monjas Trinitarias, donde al día siguiente recibió cristiana sepultura».

    Eso no hubiera sido posible si en su tiempo se le hubiese tenido por autor heterodoxo.

  7. Federico permalink
    septiembre 3, 2012 4:44 pm

    Supongo que por exceso de celo, matizado con algo de desconocimiento, se arrojan sombras sobre el padre Castellani, respecto a su ortodoxia como católico.

    No es cierto que en las sanciones (y persecuciones) que sufrió obedecieran a haber tratado “las tesis milenaristas del cripto hebreo confeso” Lacunza. Tales sanciones a Castellani se dieron antes de 1950 y obedecieron a la feroz batalla que presentó contra la decadencia y podredumbre que había dentro de su orden (la Compañía de Jesús) y en la Iglesia en general, podredumbre que estalló en el conciliábulo llamado Vaticano II y que entregó a la Compañía en manos de personas como Arrupe. Las obras de Castellani en que trata del Milenarismo son posteriores: de los años 1954: Los papeles de Benjamín Benavídes, y 1963 el que lo trata con más extensión: “El Apokalypsis de San Juan”, este último cuando ya le había sido levantada la sanción de suspensión en el sacerdocio. Debe aclararse que trató el Milenarismo en un contexto mucho más amplio que el de los escritos de Lacunza: el de la interpretación del Apocalipsis de San Juan. También debe decirse que la obra de Lacunza, según lo que se sabe, fue puesta en el Index a raíz de alusiones irreverentes que hacía sobre el Roma y el papa Clemente XIV. Nada tenía que ver el milenarismo en esa condena. Lacunza entendía que, a partir de las profecías bíblicas, se podía esperar para los últimos tiempos una apostasía generalizada de la Iglesia. Por lo mismo la Iglesia pasaría a formar parte del Anticristo, comprendido este no como un individuo, sino como cuerpo moral integrado por todos los apóstatas y ateos de la Tierra.

    Este punto fue, en definitiva, el que le valió la condena de su obra. Pocos vieron con tanta claridad lo que debía ocurrir. Obviamente, distintas corrientes protestantes lo hicieron su ídolo.

    El Milenarismo nunca fue condenado por la Iglesia, ni podría serlo, desde que forma parte de las Sagradas Escrituras (Apoc. 20, 1-10). Si se condenara el milenarismo, ¿por qué no condenar también el Génesis, o tal o cual pasaje de los Evangelios? ¿O todas las Sagradas Escrituras?

    Se condena el Milenarismo llamado carnal, error equivalente al de los judíos del tiempo de Jesús, que esperaban un rey al mando de un ejército de ángeles, dispuesto a pasar a cuchillo a los enemigos de Israel. Ese Milenarismo es llamado Quiliasmo. Muy bien explica todo esto el mismo padre Castellani, y también pueden leerse con provecho los comentarios de Mons Straubinger en su versión de la Santa Biblia, en el capítulo correspondiente del Apocalipsis.

    Todo lo que dice la Iglesia sobre el Milenarismo es lo siguiente: (Transcribo de los comentarios mencionados de Mons. Straubinger) La Suprema Congregación del Santo Oficio cortó la discusión declarando, por decreto del 21 de julio de 1944, que la doctrina “que enseña que antes del Juicio Final, con resurrección anterior de muchos muertos o sin ella, Nuestro Señor Jesucristo vendrá visiblemente a esta tierra a reinar, no se puede enseñar con seguridad” Como se puede ver, ninguna condena.

    Por último digamos que quien se tomara el trabajo de estudiar y comentar el Apocalipsis de San Juan, no encontraría manera de pasar por alto el capítulo 20, sin amputar la obra.

    A E. Mario le diría que lea con total tranquilidad al padre Castellani, que no va a encontrar una sola coma heterodoxa, menos aún herética, en sus escritos.

    • septiembre 3, 2012 6:17 pm

      Federico.

      Tu defensa de Castellani y Lacunza no revisa bien los hechos:

      ¿Cómo pasar por alto que la condena contra el jesuita Leonardo Castellani fue realizada por el Vaticano por desobediencia y por escaparse del sagrado santuario de Manresa en 1949, lugar en el cual fue asignado por su superior general, Jean-Baptiste Janssens.

      Los jesuitas tenían como voto principal la obediencia perfecta y Castellani lo violó en varias ocasiones, no sólo contra su superiorJanssens sino contra el propio Papa Pío XII, quien le negó el perdón y lo suspendió como sacerdote entre tanto no se arrepintiera, cosa que nunca sucedió.

      Fue un episodio muy similar al del cardenal jesuita Louis Billot, ejemplo a seguir de Castellani, quien fue degradado del honor de cardenal por el papa Pío XI, tras negarse a obedecer y seguir apoyando al pagano Charles Maurras con el pretexto del nacionalismo pro catolicismo de la Action Francaise.

      En el caso de Castellani, ¿cómo desendetnderse de que en su afán protagónico se lanzó en las elecciones «demonocráticas» para diputado, contrariando su sacerdocio, las reglas y órdenes directas de sus superiores?.

      Luego vino su reclusión en Manresa en 1947 y tras su huida fue suspendido por Roma en 1949. Castellani inició entonces los estudios sobre el condenado autor Lacunza (a quien tanto defienden los lefebvrianos junto con Le Floch, Louis Billot y Charles Maurras) y otros autores prohibidos por otrora la Santa Sede.

      ¿Cómo pasar por alto que Castellani, a sabiendas escribió en favor del milenarista Lacunza cuando aún permanecía condenado en el Índex oficialemnte, con penas canónicas por su difusión?.

      Efectivamente Castellani fue rehabilitado hasta 1966, no 1963, por orden del hebreo cabalista Montini Alghisi, quien realmente no tenía ninguna autoridad o jurisdicción para levantar la sanción o condena contra Castellani impuesta por el Papa Pacelli, menos si éste no se arrepintió nunca.

      La pseudo rehabilitación fue en el mismo año en el cual se eliminó el Índex que prohibía los escritos del criptohebreo de Lacunza (Josafat Ben Ezra), en 1966.

      Al hebreo Lacunza no se le sancionó sólo por «irreverencias» al Papa Clemente XIV, sino por evidente mesianismo cabalista, centrado en una supuesta reconciliación entre el talmudismo hebreo con los neo sacerdotes de la Nueva Era que pretende el surgimiento de un «mesías» para todos, que unirá a ambas creencias.

      Sólo revisa el índice de su «obra magna» y lo apreciarás.

      Lacunza (Ben Ezra) fue un verdadero precursor del mesianismo New Age en el cual se funda la espera del Anticristo. Por eso fue a dar al Índex, y nuca fue retirado de ahí. Y se debe recordar que quienes promuevan dichos escritos se hacen reos de severas condenas canónicas, hasta la excomunión latae sententia.

      Eso a Castellani no le importó.

      Federico; el Milenarismo o Quialismo sí fue condenado por la Santa Iglesia, incluso el «Milenarismo mitigado» que tú afirmas que no, fue expresamente desechado como indigno de enseñarse por la Iglesia, porque afirma novedades gratuitamente, no en base al Magisterio, y ese camino de «apertura de mente» es la ruta directa a la herejía.

      Por supuesto que en la Neo Iglesia Conciliar está y estará recibiendo grandes elogios.

      Y por último Federico, los católicos no podemos recomendar abiertamente la lectura de escritos que promuevan al cabalista Manuel Lacunza como lo hace Castellani:

      «…la edición del libro más importante que se ha escrito en los tiempos modernos acerca del Apocalipsis, que es el libro de Manuel Lacunza, La venida del Mesías en gloria y majestad»

      «hoy tenemos que hablarles de la obra de Lacunza, que es importantísima.»

      «yo no entiendo por qué los quemaron, pero por fanatismo los quemaron. De manera que yo dudo de que en esa exposición de las donaciones de Belgrano a la Biblioteca Nacional aquí, esté un ejemplar de Lacunza. Es rarísima ya, es una curiosidad bibliográfica; en Londres lo venden a 50 guineas el ejemplar. Yo, este… cuando yo ví un catálogo de bibliófilos, una vez hace mucho, pero ahora a lo mejor cuesta mucho más. 50 guineas son una libra esterlina más un chelín, y la libra esterlina está a más de 800 pesos ahora, de manera que figúrese los miles de pesos que quemaron una cantidad de gente fanática sin saber lo que hacía. La obra de Lacunza. En fin, ya hablaremos más de él, Lacunza.»

      «…porque el libro de Lacunza estuvo en el Índice, mucho tiempo, hasta ahora—que ha desaparecido el Índice.»

      (A Castellani no le importa el Índex, no le importa que la Iglesia lo condenó y ahí siguió hasta que lo desapareció el hebreo Montini Alghisi… nunca fue liberado realmente.)

      «Lacunza es sin disputa el mejor comentador del Apocalipsis en los tiempos modernos, como atestigua el gran Menéndez y Pelayo, no obstante algunos defectos de su obra; grandes defectos si se quiere, como son los defectos del genio. Llamarlos “defectos” es una atenuación porque algunas opiniones del chileno son simplezas o meros disparates, pero son balanceados por notables intuiciones. Lacunza parece saber toda la Sagrada Escritura de memoria. Lacunza retrocede hasta los primeros siglos, saltando por encima de San Agustín, San Jerónimo e incluso Tyconio donatista, hasta San Irineo de Lyon y desde allí interpreta directamente y literalmente la Escritura aprovechando por supuesto los aportes de todos los intérpretes mejores. Es superior, a mi juicio, a Newman, y por tanto a todos los modernos, el cual, Newman, interpretó solamente los textos relativos al Anticristo, como veremos en otra conferencia.»

      (1)

      Por último, ¿cómo olvidar que Castellani al final de su vida «profesa una gran devoción por el filósofo luterano Soren Kierkegaard» quien dedica ‘De Kierkegord a Tomas de Aquino’?. (2)

      Unidad en la Fe

  8. Federico permalink
    septiembre 4, 2012 11:47 am

    De a poquito alguien va revisando bien los hechos y va apareciendo la verdad.

    Efectivamente, el padre Castellani fue castigado por desobediencia y no por sus escritos sobre “la obra de Lacunza”. Por otra parte y como ya dije, aborda el análisis del Apocalipsis (y no del Milenarismo solamente) haciendo un repaso muy completo de los más importantes comentadores de las Sagradas Escrituras empezando desde los Padres de la Iglesia. No queda claro cuáles son los “otros autores milenaristas prohibidos”.

    Respecto a la fecha en que fue rehabilitado, fue en algún momento entre 1958 y 1963, durante el pontificado de Roncalli, aceptado entonces con unanimidad absoluta como verdadero pontífice aunque esto poco cambia la situación. Dedica su libro “El Apokalypsis de San Juan” el 4 de junio de 1963 a Juan XXIII (había fallecido el día anterior) “que me devolvió la misa” Como tengo la obligación de creerle al mismo Castellani, concluyo en que no es cierto que “La pseudo rehabilitación fue en la misma fecha en la cual se eliminó el Índex que prohibía los escritos del criptohebreo de Lacunza, en 1966.” Para hacer más impresionante el asunto, podríamos decir que fue rehabilitado por Juan Pablo II en la ceremonia de Asís I. Pero no es recomendable hacer a un lado la verdad para defender una idea.

    Usar hoy el argumento de que fue rehabilitado por un usurpador, no tiene ningún valor respecto al juicio que se haga sobre las actitudes de Castellani. Él vivió y murió convencido de su legítima rehabilitación, dispuesta por un papa legítimo. Como, con todo derecho, consideraba caduca la desaparición del Index y con ella el peligro de excomunión por referirse a un libro que antes había figurado en él.

    Quién bucea en temas del dominio de la historia, tiene que saber despojarse de las certezas actuales para explicar conductas pretéritas. Actuando de otra manera, nunca llegaría a entenderse el porqué de muchos (o ningún) sucesos.

    Varias veces he leído en este sitio que lo que gratuitamente se afirma, gratuitamente se niega.

    “Al hebreo Lacunza no se le sancionó sólo por “irreverencias” al Papa Clemente XIV, sino por evidente mesianismo cabalista, centrado en una supuesta reconciliación entre el talmudismo hebreo con los neo sacerdotes de la Nueva Era que pretende el surgimiento de un “mesías” para todos, que unirá a ambas creencias.”

    ¿Dónde se puede consultar el documento correspondiente? Si buscamos la Verdad, fundamentemos las afirmaciones que la van “construyendo”.

    “Federico; el Milenarismo o Quialismo sí fue condenado por la Santa Iglesia, incluso el “Milenarismo mitigado” que tú afirmas que no, fue expresamente desechado como indigno de enseñarse por la Iglesia, porque afirma novedades gratuitamente y ese camino de “apertura de mente” es la ruta directa a la herejía.”

    Vuelvo a afirmar que el “Milenarismo mitigado” no fue condenado por la Iglesia y ahora reproduzco lo que puede leerse en Denzinger 2296, ya que aparentemente la cita del comentario de Mons. Straubinger no fue suficiente:

    En estos últimos tiempos se ha preguntado más de una vez a esta Suprema Sagrada Congregación del Santo Oficio qué haya de sentirse del sistema del milenarismo mitigado, es decir del que enseña que Cristo Señor, antes del juicio final, previa o no la resurrección de muchos justos, ha de venir visiblemente para reinar en la tierra.
    Resp: El sistema del milenarismo mitigado no puede enseñarse con seguridad.

    Cuando el Santo Oficio censura alguna definición, lo hace claramente. Ejemplo: El Santo Oficio juzgó que estas proposiciones…deben ser reprobadas y proscritas como por el presente decreto las reprueba condena y proscribe…

    Otro:

    Su Santidad aprobó y confirmó el decreto de los Eminentísimos Padres y mandó que todas y cada una de las proposiciones arriba enumeradas fueran por todos tenidas como reprobadas y proscritas

    Nótese que solamente afirmo lo que puedo demostrar.

    Cuando digo que la Iglesia pasaría a formar parte del Anticristo creo que puede entenderse perfectamente el verdadero sentido, especialmente hoy que ya ocurrió lo previsto por Lacunza a finales del siglo XVIII: Cardenales, obispos, sacerdotes, diáconos, subdiáconos, lectores, ostiarios y fieles del montón, incluídos los monaguillos, pasaron a formar parte de las filas del Anticristo. Y tienen su “papa”. La Iglesia en bloque se pasó a las filas del Anticristo… con lo cual dejó de ser la Iglesia.

    Y Lacunza, supo ver 100 años antes de La Salette lo que allí se anunció, aunque si nos ponemos espesos con el Index, esto tampoco tiene mucho valor como referencia porque la aparición de la Santa Virgen en La Salette ¡figura en el Index desde el año 1923!

    Pero volviendo al meollo del asunto, sigue en pie mi afirmación anterior: Nadie hasta ahora ha encontrado una sola coma en los escritos de Castellani, que no sea de absoluta ortodoxia, al contrario de lo que ocurre con más de un “prócer” de la resistencia católica, que basan del principio al fin sus estudios y conclusiones en manifiestas herejías.

    • septiembre 5, 2012 8:50 am

      Federico.

      Nos acusas de «hacer a un lado la verdad» y de afirmar gratuitamente.

      ¿Por qué negar que Castellani sí promovió a Lacunza a quien citó, promovió y reprodujo varias veces y de quien dijo que era «el máximo comentarista moderno del Apocalipsis»?

      ¿Por qué desechar que sus comentarios en favor de Lacunza los escribió entre 1954 y 1963, antes de que Pablo VI (ilícita e inválidamente) desapareciera el Index librorum prohibitorum et expurgatorum el 7 de diciembre de 1966?

      Al menos tú mismo afirmas que Castellani publicó el Apocalipsis de San Juan en 1963 tres años antes de la «desaparición» del ïndex de libros prohibidos, y por tanto contra el Índex, es decir, so pena de las penas canónicas del propio Índex.

      El Índex pena aún hoy -no penaba sólo hasta diciembre de 1966- a quien promueva en favor de dichos títulos a la excomunión ipso facto.

      Nos dirás que a Castellani no se le excomulgó oficialmente, pero la verdad es que sus obras fueron impresas y difundidas escasamente entre 1954 y 1967 (sin la aprobación eclesiástica) y en forma masiva hasta 1970, también sin la censura eclesiástica.

      ¿Eso es «hacer a un lado la verdad»?…

      ¿Por qué negar que Castellani sabía plenamente que dichos escritos habían sido prohibidos por el Índex cuando él los promovía y defendía en sus escritos?.

      O tú coincides con el hereje Ceriani quien también deplora la inscripción de la obra de Lacunza en el Índex:

      «Su libro debería haber sido ya liberado del Index, pues los motivos por los cuales se prohibió no tienen actualmente la menor vigencia.»… (LACUNZA Y CASTELLANI, J.C. Ceriani)

      ¿Por qué negar que Castellani fue (inválidamente) rehabilitado hasta 1966, por el antipapa Pablo VI, tal como lo indican todas sus biografías y lo señalan los propios lefebvrianos, y que nunca se arrepintió de las razones por las cuales fue suspendido justamente por la autoridad del Papa Pío XII?.

      Como justamente demandas pruebas,aquí las precisamos. Y aquí:

      «Como sacerdote recién en 1966, por gestión del Nuncio Apostólico, Mons. Lino Zanini, se le restituyó plenamente el ministerio sacerdotal, sin reservas ni condicionamientos.»

      Zanini, muy cercano a Montini Alghisi en la Secretaría de Estado, fue hasta 1966 nuncio en Jerusalén, Palestina y Egispto, luego -en 1966- pasó a Argentina.

      Tal vez tú como otros te confundes de fechas por los textos alterados de los lefebvrianos:

      «Vive penosamente del ejercicio de un periodismo siempre combativo, hasta que en 1966, durante el papado de Juan XXlll, se “le devuelve la misa”, se le restituye sin reservas el ministerio sacerdotal.» (PELEÓ CON TODOS MENOS CON DIOS)

      Juan XXIII no pudo devolverle el ministerio sacerdotal, primero porque como bien sabes falleció el 3 de junio de 1963 y segundo porque no era Papa legítimo, y todos sus actos como tal fueron nulos.

      Insistes que el milenismo o «milenarismo mitigado» del hebreo confeso Lacunza no fue condenado nunca por la Iglesia, pero entonces dinos ¿por qué se condenó su obra completa al Index librorum prohibitorum et expurgatorum, precisamente donde vierte sus tesis milenaristas o milenistas?.

      ¿No te parece suficiente condena?

      También hay otros textos milenistas condenados y combatidos por los Padres de la Iglesia que Castellani defiende explícitamente y a conciencia…
      léelo tú mismo (aquí esta la fuente):

      «…porque a mí me acusaron de milenista y me siguen acusando, el Presbítero Doctor, (que no es doctor), Mejía, y me han venido una cantidad de castigos por milenista pero sin decir que es por eso, castigos anónimos. Se los mandaban a Monseñor Tavella o a Monseñor Copello acá y después por varias personas que he conocido, bastante eminentes, que han sido perseguidas por eso, por ser milenistas, de las cuales mencionaré las principales:

      P. Víctor Anzoategui: Doctor en Escritura por la Gregoriana de Roma. Se manifes- tó milenista. Diré libremente ¡lo persiguieron sin descanso, hasta hacerlo perder la salud y después la fe y después el juicio! El General Jesuíta Jannssennss y el Provincial de la Argen- tina Travi no lo dejaban entrar en Buenos Aires donde él quería ir a ver a su madre (no la pudo ver ni siquiera cuando se murió) mandándolo sucesivamente a Chile, de donde lo echaron por milenista también, Mendoza, Montevideo y el Chaco; y no a enseñar Escritura sino Primeras Letras.

      Estando ya en el Chaco con la salud averiada, perdió la fe, se hizo protestante, se casó, perdió el juicio y aportó a Santiago de Chile, donde fue algún tiempo empleado de la Biblioteca Nacional. Volvió a la Argentina del todo arruinado, loco de atar, yo lo asistí en su última agonía. Daba horror.

      2° P. Antonio Van Prixtel S.C.J.: holandés, profesor de Escritura, hombre muy docto e inteligente. Fue echado de Holanda y enviado a Montevideo, donde en 1945, escri- bió un gran volumen defendiendo su idea, que hizo mimeografiar ayudado por católicos uruguayos, es decir, por los jóvenes de la Acción Católica. Se lo llama “El testimonio de Nuestra Esperanza” (confidencial) y yo lo poseo. Cuando se supo, lo enviaron a Buenos Aires, donde no tenía nada que hacer, y después a Tucumán, menos, donde lo vejaron y mal- trataron. Pidió perdón, destruyó su libro, y lo dejaron volver a Holanda. No sé como acabó.

      3° P. Florentino Alcañiz: Hizo en Roma su tesis de Doctor en Escritura Sacra sobre “La Iglesia Patrística y La Parusía”, a la cual ya me referí. Yo la traduje al castellano por- que él me pidió que lo hiciera y me regaló su libro, lo modifiqué un poco, lo amplié y está impreso. Ahí el hizo un trabajo minuciosísimo sobre todos los Padres de los primeros siglos de la Iglesia, hasta el siglo V y resulta que en el siglo I, todos sin excepción, eran milenistas y después en el siglo II, III, IV, V, fueron disminuyendo, sobre todo después de la exégesis de S. Agustín muchos abandonaron la idea milenista y se hicieron alegoristas.

      Al final hace un esquema donde pone a los Santos Padres por orden, por siglos y por fechas, donde uno ve que la tradición de la Iglesia entonces era el milenismo espiritual que dicen ahora. Por eso digo yo que jamás va a condenar la Iglesia el milenismo espiritual porque eso sería cortar la rama donde está sentada; porque ella está asentada sobre la tradición.

      Profesor del Seminario de Cerdeña y después del de Granada, al publicar su libro latino, estrictamente científico, en 1933 fue echado de sus cátedras y más tarde enviado a Buenos Aires, donde me regaló su tesis para que la tradujera. Como aquí no tuviese nada que hacer, pidió lo mandaran de misionero al Perú, salió de la Compañía de Jesús, y vivió años en la montaña peruana de ermitaño. Desde allí me envió un enorme libro manuscrito con su defensa, que por desgracia yo regalé a Federico Bracht. Me pareció notar en ese libro asomos de enajenación mental.

      Muchos otros he conocido aunque menos de cerca, como el eminente escriturista jesuita P. Rovira, el que escribió el artículo “PARUSIA” en la Enciclopedia Espasa y otros…

      El resultado de este fenómeno increíble es que hoy día es obligatorio interpretar el Reino de los Mil Años conforme a la patochada de San Agustín.

      Es triste tener que decir esto de San Agustín pero no hay mas remedio. Es una interpretación tan arbitraria y tan inverosímil que no se puede mantener ni un sólo momento.»

      Hay otros comentarios de Castellani que bien le valen una sanción canónica, como los siguientes:

      «Una monja me preguntó si en el cielo veríamos al Niño Dios. Respondí sin broma que lo veríamos e incluso lo daríamos a luz. Como se escandalizó fierazo, por no citarle el dicho de Cristo: «EI que hace la voluntad de Mi Padre, ése es mi padre, y mi madre y mis hermanos», -no hay que andar manoseando la escritura como un tendero luterano- le cité el modesto versito de Campoamor»…

      «La fuente de la poesía, nos dice Castellani, es el estilo oral, ese estilo con el que se han creado los libros más grandes de la humanidad: la Biblia, el Korán, el Talmud, los poemas homéricos, etc., estilo olvidado y desvalorizado, a su juicio, por la soberbia intelectual de la modernidad.»

      Unidad en la Verdad

  9. Federico permalink
    septiembre 6, 2012 8:49 pm

    Esta polémica se agota porque se convierte en un diálogo de sordos. Aporto hechos y se me «refuta» con escritos y enlaces ¡que confirman lo que yo digo!

    Intento aclarar hechos y se me responde con aberraciones:

    hasta que en 1966, durante el papado de Juan XXlll, se “le devuelve la misa”, se le restituye sin reservas el ministerio sacerdotal. ¿Juan XXIII papa en 1966? ¿Zanini nuncio en 1966? Fue nuncio en Argentina entre 1969 y 1974.

    Internet es útil… en la medida que se consulte con cuidado.

    Quién fue el padre Castellani:

    Su formación (Fragmentos de la biografía escrita por Irene Caminos, profesora que lo cuidó en su ancianidad) En Europa, en Francia y en Italia, sí. Es el único argentino que ha conquistado con su esfuerzo, es decir, saliendo airoso de todas las pruebas, hasta alcanzar dos títulos doctorales en dos centros de los más encumbrados de la intelectualidad europea: la Sorbona, de París, y la Pontificia Universidad Gregoriana, de Roma. Y eso, antes de incoarse en ambas la fatal decadencia actual. En la Ciudad Eterna, testigo de su primera hazaña, se postuló al examen ad gradum, el cual exige el conocimiento y desarrollo de temas tan especializados y difíciles, que, en cada siglo, uno o dos candidatos se presentan a rendirlos; mas, en ocasiones, ninguno los aprueba. Castellani, con notas todas de sobresaliente, obtuvo el título más alto que la Iglesia Católica otorga a los más sabios entre sus doctores (1931). Diploma bulado lo llaman por llevar como protocolización el mismo sello de plomo de las bulas pontificias. En él, el Papa Pío XI y el Prepósito General de la Compañía de Jesús, P. Wladimiro Ledóchowski, acreditan con su firma, que Leonardo Luis Castellani es Doctor Sacro Universal (cum licentia ubique docendi), que su título lo habilita a enseñar Filosofía y Teología, aquí, como en Inglaterra, la China o el Japón, sin reválida. El mismo le da derecho a publicar sus escritos sin censura previa, en los países donde no hubiese otro título igual o superior al suyo. Superior, no existe; igual, nadie lo tenía en la Iglesia desde el descubrimiento de América hasta él. Magnífica hazaña de atleta intelectual, registrada sólo en el libro de la vida que los ángeles llevan en el reino de los cielos.

    Sobre su suspensión:

    El día de “San Perón” de 1949 (17 de octubre) fui expulsado de la Compañía S. I., el pretexto que se dio no fue el milenismo (…) Después de expulsado, de inmediato fui a parar a Salta, al Palacio Arzobispal. Un expulsado de una orden religiosa queda suspendido por un año, porque se supone que un expulsado tiene que haber hecho delitos. Al cabo del año de oír Misa y dar clases. Monseñor Tavella, que era mi «Obispo Benévolo» (los que expulsan de una Orden religiosa tienen que encontrar un «Obispo Benévolo» que los reciba) pidió mi «incardinación» en su diócesis mandando informes favorables. No respondieron del Vaticano una sola palabra, mi suspensión duró más de dos años: por eso dije eso de los informes secretos. Eso no puede responder sino a informes que contradijesen los de Monseñor Tavella (quién mandó varias veces informes favorables a mí) (…) A los dos años y pico, como dije, llegó el levante del castigo. Dando clases para Monseñor Tavella no ganaba lo necesario para vivir: el pidió la «incardinación a la diócesis», y después de la inevitable tardanza («las cosas de Palacio van despacio») vino con la condición de que yo no pudiera salir de Salta y cada vez que saliera quedaba suspendido, no podía decir Misa.
    Para lo cuál se servirán del Santo Sacrificio de la Misa, que no está hecho para eso. Simplemente el General de los Jesuitas o el Cardenal Pizzardo querían impedir yo fuese a Buenos Aires. ¿Por qué? Porque para conseguir que yo fuese expulsado sin proceso, habían dicho al Sumo Pontífice que yo era de un escuadrón de nacionalistas que eran capaces de incendiar el Colegio del Salvador o lo estaban por incendiar. El Papa concedió la dispensa temporaria del proceso, con el proviso natural que el proceso había de hacerse más tarde conforme manda el canon 654 en el caso de «Periculum in mora» peligro en la demora. Porque hay un Canon que dice que sí hay peligro en la demora para expulsar a un Sacerdote de una Orden, se puede dilatar el proceso, dejarlo sin hacer para que no haya escándalo o ruido o lo que sea y dejarlo para después, cuando todo esté más tranquilo. No lo hicieron nada. De manera que han desobedecido al Papa, al derecho Canónico y al derecho natural como diez veces.
    A mí me echaron porque decían que había desobedecido durante veinte años y no había desobedecido ni una sola vez.
    El canon no se cumplió; y el periculum in mora, fue una mentira colosal que encajaron al Papa Pío XII; de la cual ya habrán dado cuenta a Dios.

    El padre Castellani fue un profeta. Y como tal, combatido a muerte. De otra manera no se entiende la persecución que tuvo dentro de la Iglesia cuando, como ya he dicho y no se me ha podido demostrar lo contrario, ni una coma de sus escritos está fuera de la ortodoxia.

    Para ejemplo de su oficio de profeta, un botón: Su combate a la putrefacción que veía en la Iglesia:

    Lo que llaman la “apostasía de las masas” (que no es de las masas solamente) no se cura con “propaganda fide” […]
    ¿Podría haber apostasía del mundo, si no hubiese porquería en la Iglesia? Si la Iglesia fuera hermosa, atraería necesariamente y no repelería. Y sería hermosa si estuviese limpia. Esto no tiene vuelta de hoja […] si la Iglesia no atrae, no es atractiva, y si repele, es repelente. Antes no lo fue, ahora lo es. Esto es todo […] Para detener la apostasía habría que curarle el mal aliento y para eso purificarle la sangre: es decir, suprimir la fealdad de su faz, y para eso contrarrestar la iniquidad de sus entrañas; porque mientras mane iniquidad, olerá mal y mientras huela mal rechazará a los hombres.”
    (El Ruiseñor fusilado, p. 120-121)

    Es de notar que esta obra fue escrita en 1952, cuando ni se soñaba con CVII y 60 años antes de que estallara a la luz pública el escándalo de las aberraciones sexuales del clero.

    En la Argentina no hemos tenido pastores santos, si se exceptúa el bondadoso y un poco corto Mamerto Esquiú. Hemos tenido en cambio pastores malnacidos, pastores cobardes, pastores avarientos, pastores iletrados, pastores simoníacos, pastores embusteros, pastores calumniadores, pastores concubinarios; y los peor de todo, pastores villanos, estúpidos o idiotas. Yo lo pongo en tiempo pasado, S.E. es muy posible que pueda conjugar el tiempo, si, como creo, no pertenece a ninguna de esas categorías. El diablo conoce muy bien aquello de“heriré al pastor y se dispersarán las ovejas”. En nuestro país ha hecho una obra fina; y a consecuencia de ella, la Iglesia Argentina es un montón de ruinas, donde se esconden no pocos bichos, algunos venenosos”. (Carta al Nuncio Zanín, 1954, Seis Ensayos, p. 207).

    Como verdadero Profeta, no era la cobardía la que gobernaba sus actos. Mientras escribía esas cosas, luchaba contra las sanciones injustas que los mismos a los que desenmascaraba con sus escritos, le habían aplicado.

  10. Federico permalink
    septiembre 6, 2012 9:02 pm

    Otro poquito, por si a alguno le interesa

    Sobre «la condena» del Milenarismo

    De manera que esa interpretación alegórica es una caída de San Agustín por consideración a San Jerónimo, él hizo esa interpretación nueva y dijo «Yo no digo que esta sea la interpretación única posible; hay otra, y esa otra no me atrevo a condenarla porque ha sido seguida por muchos Santos y muchos Mártires». Y San Jerónimo, que estaba furioso contra los milenistas de su tiempo, dice lo mismo: «No nos atrevemos a condenar el milenismo porque lo han seguido muchos Santos y Doctores y Mártires».Y resulta que ahora se atreven; hay mucha gente que condena el milenismo puro y trata de hacer castigar a los que los siguen. No son lo mejor de la Iglesia Católica ni como ciencia ni como calidad los que hoy día tienen una especie de conjura contra el milenismo espiritual.
    De manera que no quedaría más que aceptar el milenismo alegórico de San Agustín, que él mismo dijo que era una interpretación alegórica y nada más (leer ese milenismo alegórico en mi libro, Pág. 271).
    Así que tienen aquí figurados muy veraz y exactamente los tres milenismos, con lo cual cumplo mi oficio de Doctor en Teología y con esto no predico ninguno de los tres Milenismos, sino simplemente digo «le cose come stanno»
    (Padre Leonardo Castellani)

    P. Florentino Alcañiz: Hizo en Roma su tesis de Doctor en Escritura Sacra sobre “La Iglesia Patrística y La Parusía”, a la cual ya me referí. Yo la traduje al castellano porque él me pidió que lo hiciera y me regaló su libro, lo modifiqué un poco, lo amplié y está impreso. Ahí el hizo un trabajo minuciosísimo sobre todos los Padres de los primeros siglos de la Iglesia, hasta el siglo V y resulta que en el siglo I, todos sin excepción, eran milenistas.
    Al final hace un esquema donde pone a los Santos Padres por orden, por siglos y por fechas, donde uno ve que la tradición de la Iglesia entonces era el milenismo espiritual que dicen ahora. Por eso digo yo que jamás va a condenar la Iglesia el milenismo espiritual porque eso sería cortar la rama donde está sentada; porque ella está asentada sobre la tradición.
    (Padre Leonardo Castellani)

    Creían tranquilamente que iba a haber un Reino de Mil Años; y que la Iglesia va a ser en él sumamente próspera y va a ser regida de hecho por Jesucristo, después de la Parusía o sea después de que Jesucristo haya bajado a vencer al Anticristo. San Justino Mártir, San Ireneo, Tertuliano, Lactancio, Ambrosio y San Agustín joven así lo entendieron (Padre Leonardo Castellani)

    Menéndez y Pelayo en el Cap. VI del tomo IV de Heterodoxos, que escribió sobre Lacunza dice: «como todos saben, el milenismo espiritual o puro es una opinión libre». (Padre Leonardo Castellani)

    «Insistes que el milenismo o “milenarismo mitigado” del hebreo confeso Lacunza no fue condenado nunca por la Iglesia, pero entonces dinos ¿por qué se condenó su obra completa al Index librorum prohibitorum et expurgatorum, precisamente donde vierte sus tesis milenaristas o milenistas?.» (FC)

    La respuesta la aporta Castellani, junto con Menéndez y Pelayo:

    Eyzaguirre chileno que tradujo al latín el Lacunza {«Apokalypseos commentarium literale») consiguió su aprobación en Roma. Por desgracia introdujo ocurrencias suyas

    ¿Quién fue Lacunza? Diré brevemente: es un grandísimo exégeta chileno (y argentino) que escribió un solo libro »La Venida del Mesías en gloria y majestad» con el pseudónimo de Josafat Ben Ezra; libro insigne según Menéndez y Pelayo; cuya primera edición en español la hizo en Londres su tocayo Manuel Belgrano, el prócer. El libro fue puesto en el Index, no por ser milenista, como pretenden ahora, sino por el pseudónimo judío y algunas alusiones oscuras, que hoy no se entienden, contra el Papa Clemente XIV, el que suprimió a los Jesuitas.

    Pero aportemos de nuestra cosecha:

    Encíclica «Divino Afflante Spiritu»:

    Para el desempeño de esta obra tengan ante los ojos los intérpretes qua, como la cosa principal de todas, han de procurar distinguir bien y determinar cuál es el sentido de las palabras bíblicas llamado literal

    Por lo cual la exposición exegética atienda principalmente a la parte teológica, evitando las disputas inútiles y omitiendo aquellas cosas que nutren más la curiosidad que la verdadera doctrina y piedad sólida; propongan el sentido llamado literal y, sobre todo, el teológico con tanta solidez…

    Apocalipsis 20, 1-10:

    Y se apoderó del dragón (…) y lo encadenó por mil años (…) hasta que se hubiesen cumplido los mil años (…) y vivieron y reinaron con Cristo por mil años. Los restantes de los muertos no tornaron a vivir hasta que se cumplieron los mil años (…) serán sacerdotes de Dios y de Cristo, con el cual reinarán los mil años (…) Cuando se hayan cumplido los mil años

    Seis veces dice “mil años”

    El papa Pío XII se olvidó de aclarar que su exhortación a la interpretación literal (que desde siempre es recomendada por la Iglesia) no debía aplicarse al capítulo XX del Apocalipsis.

    Es desde todo punto de vista absurdo pretender que el milenarismo está condenado por la Iglesia. Y no bastan el Denzinger ni el sentido común para combatir esa idea.

    ¿Por qué está en el Index la aparición de la Santísima Virgen en La Salette? Sospecho que por lo mismo que Lacunza: «Roma perderá la fe y será sede del Anticristo»

    ¿Y Santa Teresa de Jesús que también está en el Index con su autobiografía?

    Me parece que allí somos legión los condenados por esa cuestión del Index, tomada sin discernimiento.

    Para terminar esta parte, Si Castellani dice de Lacunza que es el mejor comentarista del Apocalipsis (no sólo de su capítulo 20), sus razones tendrá:

    leí toda mi vida ese libro, comenzando a los 7 ó 9 años. Había un libro en mi casa, con figuras del Apokalypsis, y lo leí porque me parecía un cuento de hadas, era una cosa curiosísima. Después leí todos los comentarios que haber pude, incluso me fui a Montserrat, a la biblioteca de los benedictinos, a leer los comentarios del Apokalipsis que allí había y que son muchísimos. Y comentarios protestantes del Apokalipsis tengo unos ocho. Segundo que todo lo que puse allí está sólidamente afianzado en lo que han dicho los mejores escritores, los Santos Padres, los mártires, los Santos, pues desde San Jerónimo acá se ha trabajado enormemente en eso, y se ha conseguido mucho naturalmente (…) he traducido del latín todos los testimonios a la letra y todos los autores en fila, que me facilitó el P. Florentino Alcáñiz, en el libro «La Iglesia Patrística, y la Parusía». (Padre Leonardo Castellani)

    Sería presuntuoso de mi parte, mejor dicho ridículo, poner mi opinión por sobre la del padre Castellani. Yo que apenas tengo siete libros y medio en mi biblioteca (uno perdió las tapas y algunas hojas) y manejo a los tropezones el español… y gracias.

    • Tomás permalink
      febrero 23, 2014 10:44 am

      El Santo Oficio con decreto del 21 de julio de 1944, ratificado por el Papa el 20 de julio de ese año, enviado en forma de carta al Arzobispo de Santiago de Chile, José María Caro Rodríguez, decidió que le milenarismo o milenismo mitigado, enseñado por Lacunza, no puede ser enseñado con seguridad (Denzinger 3839).

      FC: pero además de milenarismo mitigado de Lacunza, también rechazó en 1820 la obra entera por herética y por ello fue confinada en el Index desde entonces, prohibiendo su publicación y su difusión bajo pena de excomunión ipso facto.

      Si las obras de Castellani difunden el milenarismo mitigado, las medidas del Santo Oficio han sido justas.
      También llama la atención que ha sido Montini quien «rehabilitó» a Castellani. Dado que Montini no era Papa y Castellani falleció sin mostrar arrepentimiento las medidas tomadas contra el siguen vigentes.

  11. Tomás permalink
    febrero 23, 2014 10:14 am

    Lo peor de Castellani no ha sido su milenarismo y su desobediencia, sino el hecho que aceptó las herejías del «concilio» y la «liturgia» de Montini. Con lo cual abandonó la Fe, en el supuesto caso que no la hubiese arrojado antes por la borda.

  12. holita permalink
    abril 25, 2016 4:19 am

    Te copias del Rubius

  13. Restaurador permalink
    abril 25, 2016 11:15 am

    ¡¡¡ EXCELENTE POST !!! 😯

  14. anunciacion17 permalink
    marzo 13, 2018 6:52 pm

    Palabras del Santo Evangelio: «No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos […] Así que, por sus frutos los conoceréis.»

    Si las obras de Shakespeare son beneficiosas, entonces fue un hombre bueno. Si fue bautizado, obedeció a los legítimos Pastores de la Iglesia, y sus obras son católicas (cree y profesa la Doctrina Cristiana), entonces era católico.

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